El restaurante La Viña, además de ofrecer a su clientela 3 salones (principal, planta alta y subterráneo) una terraza de verano y una zona de cafetería, ha ampliado su oferta con un espacio reservado a los más pequeños, para que puedan jugar, antes, durante y después de las comidas, cuando sus padres decidan.

La Viña nos tiene reservado un verdadero tesoro para el paladar en el que tu bolsillo no se verá perjudicado, pues a pesar de los manjares y de la cantidad de comida que sirven en este restaurante, los precios son realmente populares, otro motivo más para venir en familia, pues bien sabemos todos lo mucho que comen nuestros pequeños.

Conocer un poco más La Viña

Al entrar en La Viña tanto grandes como pequeños ya podrán empezar a disfrutar, pues la decoración interior es realmente sorprendente. Todas las paredes están llenas de artefactos, artilugios, herramientas y otros objetos tradicionales del campo que nuestros hijos y muchos de nosotros desconocemos, por lo que podemos sentarnos y jugar a adivinar qué es y para qué servían cada una de esas piezas de labranza, cultivo, maquinaria, pesos… que cuelgan del techo o de las paredes.

Todo un museo de historia que nos servirá de entretenimiento y aprendizaje mientras esperamos los deliciosos platos que nos ofrecen en su carta. Los niños, boquiabiertos, encontrarán aquí unas buenas alas para su imaginación, y los padres abrirán sus ojos extrañados al ver los precios, tan económicos, que presentan en los menús.

Es casi un deber pedir el solomillo a la viña y las gambas al ajillo para saber que estamos ante unos maestros de la cocina y que, además, no les temen a las cantidades. La ensalada César con pollo crujiente, el revuelto de la casa, la rosada a la plancha, las chuletillas de cordero o el solomillo, para terminar con el mejor sabor de boca con su deliciosa tarta de chocolate o sus legendarios pijamas, una buena ruta de sabor, calidad y precio que se debe de comprobar por uno mismo y compartir con la familia.

¿Acaso no somos realmente felices viendo a nuestros hijos comer? En La Viña, el sabor y espectacularidad de sus platos hará que nuestros hijos devoren su comida como pocas veces los hemos visto, y después a jugar en el rincón que han puesto para ellos, con un castillo hinchable que siempre es un elemento que a todos les divierte.

Un lugar ideal para ir a comer con niños en Sevilla

Ya sabemos la dificultad que encontramos para disfrutar de almuerzos sabrosos y consistentes en compañía de nuestros hijos al mejor precio posible, pero esta queda solventada con La Viña, aunque seguimos sin entender por qué no existen más espacios dedicados a la restauración que cumpla con este requisito fundamental, el de dar opciones a las familias con hijos.

Y es que debemos tener en cuenta que Andalucía es la Comunidad Autónoma con mayor número de familias numerosas, y de esta Comunidad es Sevilla la que se coloca en los puestos de cabeza, por lo que consideramos que es un grave error que los empresarios y emprendedores hosteleros no tengan estas cifras en cuenta a la hora de hacer crecer sus negocios, abriendo nuevos servicios enfocados en este grupo clientelar.

Especialmente para este tipo de familia con más de tres hijos, pero para cualquier otra que quiera salir a comer sin las estrecheces de los restaurantes habituales, en los que los niños apenas pueden moverse, donde tienen que portarse como si fuesen adultos, donde los precios se hacen imposibles para más de dos comensales, la existencia de restaurantes como La Viña se hacen imprescindibles para que podamos seguir manteniendo una buena calidad de vida. Y es que todos reconocemos que salir de vez en cuando a comer con amigos o familiares sin preocupaciones también es calidad de vida.

Zona recreativo de La Viña, ideal para los más pequeños y los más grandes

Estamos cansados de bocadillos en el parque, de no poder disfrutar de buenos platos, de tener que buscar terrazas cerca de algún parque o con espacio suficiente para que puedan moverse, pues sabemos que los niños necesitan de actividad y, la mayoría de ellos, una vez que han comido necesitan moverse, no pueden quedarse quietos en sus sillas mientras los adultos reposan el rato del café.

No existen tantas terrazas, ni el tiempo acompaña siempre, no existen demasiados lugares donde quedarnos completamente satisfechos por la cantidad, sabiendo que también recibimos calidad en los alimentos, no existen demasiados bares ni restaurantes donde podamos comer tranquilamente sabiendo que, aunque seamos cinco, la factura final no será desorbitante.

En Sevilla, en el Viso del Alcor, está ese restaurante que reúne todas estas características. Ahora sabemos dónde ir para que los niños degusten buenos platos, se diviertan con espacios exclusivos para ellos, donde todo está controlado y nos les va a pasar absolutamente nada, y los padres pueden saborear relajadamente una buena carta de vinos o una cerveza Cruzcampo de ORIGEN bien fresquita para acompañar la calidad de unos productos de primera, preparados con exquisito gusto y saber hacer.

¿Dónde si no? En La Viña, desde 1980 en la Calle San Mateo 6, llama ya y reserva al número de teléfono 955 94 57 20 .

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